A menudo, las emprendedoras y empresarias confunden la dilación con “pereza”. Hablan de ello como si fuera un desagradable defecto de carácter. La procrastinación no tiene nada que ver con falta de motivación o energía.
Entonces, si no es pereza, ¿qué es “dilación”? se pueden usar sinónimos como “posponer”, “retrasar”, “aplazar”, “dejar para el último minuto”, todas son válidas. Lo que quiero decir con procrastinación… tomar la decisión (consciente o inconsciente) sin una razón válida para retrasar o no completar una actividad u objetivo que también se ha comprometido, y en su lugar hacer algo de menor importancia, a pesar de que existen consecuencias negativas por no cumplir con la actividad original.
Puedes ver en esta definición que la procrastinación es de alguna manera una decisión intencional. Dicho esto, puede suceder muy rápido, casi automáticamente, y ser como un hábito, por lo que a menudo es posible que ni siquiera te des cuenta de que has tomado la decisión. Otro elemento es que pospone innecesariamente o no completas algo que te comprometiste a hacer (contigo o con otros).
Pon la mano en tu corazón, mira a tu alrededor, concéntrate en la semana pasada y responde ¿Te identificas con alguna de estas situaciones?
La consecuencia de identificarte con alguna de esas situaciones te hace sentir
Así que ¿Sueles procrastinar todo el tiempo? ¿No terminas nada de lo que te propones? y ello ¿te supone un verdadero problema porque tu vida y tu negocio siempre está a medias?
Te entiendo, he estado en tu lugar. Se la frustración que se siente no terminar nada.
A menudo verás gente exitosa, emprendedora que hace relativamente poco ha iniciado su negocio y ya son referentes y seguramente tu quieres lo mismo, pero no lo logras. Quizás hayas probado, ser más productiva estableciendo bloques horarios, agendas, planificadores, todo tipo de herramientas y apps y nada ha resultado… A mí también me pasaba lo mismo.
No basta con decirte a tí misma o que alguien te diga ¡Sólo hazlo!. Es algo ridículo, ya que el simple hecho de decirlo no hace que suceda. Nada sucede por arte de magia, hay que tomar acción y cambiar tus hábitos para que llegues a ser más productiva.
Tienes que ser consciente que la procrastinación es un hábito, por lo que debes procurar reducirlo al máximo. Antes que nada pregúntate ¿por qué estoy procrastinando? ¿Por qué me cuesta terminar las cosas? ¿Qué excusas me pongo a mi misma?: tómate tu tiempo para entender exactamente por qué postergas las cosas. Hay diferentes razones y estas son algunas de las más comunes:
Si te sientes identificada, te dará que tienes falta de confianza en ti misma, te bloqueas y ello te impide cumplir con aquello que te propones.
Todo esto se basa en tu mentalidad y cómo tu cerebro automáticamente te detiene cuando decides tomar acción. Romper con esto puede resultar difícil, ya que requiere de tu tiempo, concentración, paciencia y compromiso.
Las excusas de procrastinación generalmente involucran algo de verdad sobre la situación actual que estas enfrentando en tu negocio, por lo que concluyes que es mejor posponer una tarea u objetivo para otro momento. Estas excusas te hacen sentir que postergar está justificado, es razonable, aceptable y está bien. Como tal, estas excusas juegan un papel importante en llevarte a posponer las cosas, y debes aprender a descartarlas. Aquí hay algunas excusas comunes de la procrastinación. Cada excusa se divide en 2 partes, el grano de la verdad y su inútil conclusión.
Lo que te dices todo el tiempo que te lleva a procrastinar:
Puede desafiar tus excusas inútiles y desarrollar conclusiones más útiles preguntándote:
¿Cuáles son las pruebas fácticas o las razones por las que es mejor para mí posponer esta tarea u objetivo?
¿Cuáles son las pruebas fácticas o las razones por las que es mejor para mí comenzar esta tarea u objetivo ahora?
¿Es realmente cierto que a la larga estaré mejor retrasando esta tarea u objetivo?
¿Es realmente cierto que en este momento no puedo hacer ni siquiera un pequeño comienzo en la tarea u objetivo? ¿Puedo completar algunas partes de la tarea o el objetivo ahora, aunque las condiciones no sean las ideales?
¿Es realmente cierto que más tarde es un mejor momento para hacerlo?
Si empiezo un poco en la tarea u objetivo en este momento, ¿qué podría suceder? ¿Cómo podría sentirme?
Si no empiezo la tarea o el objetivo en este momento, ¿qué podría suceder? ¿Cómo podría sentirme?
¿En qué áreas estás procrastinando?
La procrastinación puede ocurrir en diferentes áreas de tu negocio, también puede involucrar tareas u objetivos en los dominios de la vida. Como salud, finanzas, familia, relaciones, autodesarrollo y decisiones. Realmente cualquier tarea que necesites completar, cualquier problema que debes resolver o cualquier objetivo que desees lograr, puede ser una fuente de dilación. Para muchas empresarias, habrá ciertas áreas de su vida son capaces de seguir adelante y ciertas áreas donde reina la procrastinación.
Consecuencias de la procrastinación:
Las consecuencias positivas de la procrastinación; alivio de la incomodidad por hacer la tarea, sentirte bien por haberte apegado a tus reglas y suposiciones inútiles, y obtener placer de tus actividades de dilación, son recompensas que mantienen la procrastinación.
Las consecuencias negativas de la procrastinación, como más incomodidad (p. Ej., Culpa y vergüenza), preservar las reglas y suposiciones inútiles, la autocrítica, acumular tareas, el castigo o la pérdida, también mantienen la procrastinación, ya que hacen que la tarea o el objetivo sea aún más aversivos. , así que la próxima vez, la procrastinación parece una opción atractiva.
El ciclo de la procrastinación
La procrastinación surge de reglas inútiles y suposiciones sobre lo que esperas de ti misma y del mundo. Cuando estos se activan, te llevan a sentir (o detectar) algún tipo de incomodidad por realizar una tarea u objetivo que te has propuesto.
Si no puedes tolerar esta incomodidad (es decir, detestas la sensación), es probable que utilices la postergación como una forma de evitar o esquivar la incomodidad. Además, si puedes encontrar excusas y justificaciones convincentes para procrastinar, es más probable que recorras el camino de la procrastinación.
En vez de hacer lo que tienes que hacer, te dedicas a hacer cosas placenteras o que te distraigan, como un sustituto de las tareas y metas que tienes que te has propuesto. A su vez, las consecuencias positivas o negativas, hacen que sea más probable que recurras a la procrastinación la próxima vez que te enfrentes a una tarea u objetivo similar. Esto sucede porque obtuviste una recompensa por la procrastinación.
Si has venido postergando tus tareas y metas por demasiado tiempo, que sepas que no debes ampararte en las excusas y debes llegar a la raíz del problema cuanto antes.
Para ayudarte en el proceso de encontrar las razones fundamentales por las que personas procrastinan y superarlas se han definido 5 tipos diferentes de procrastinadoras. El propósito es que identifiques el tuyo y puedas empezar a realizar acciones para superarlo.
Una de las razones más comunes para postergar las cosas es la poca capacidad de planificación.
Este tipo hace que establezcas metas grandes y audaces sin pensar si son realistas o medibles. Simplemente escribes tus propósitos de año nuevo en una hoja de papel y esperan que el universo lo haga realidad, por arte de magia. Sin currártelo, sin poner energía en lo que quieres. Así no es como funciona.
Un mecanismo para no responsabilizarte de tu procrastinación puede ser que no establezcas metas claras y medibles. Si no lo tienes claro y puedes medir los resultados que vas obteniendo, pues no te responsabilizas y sigues posponiendo tu trabajo sin consecuencias negativas. Después de todo, si no puedes medir la meta, no hay forma de decir que has fracasado.
Aquí va un ejemplo: Iniciar un negocio. ¿Ves que no hay forma de saber si realmente has logrado estos objetivos? No sabes qué tipo de negocio. ¿En cuanto tiempo lo harás? ¿ Cuáles serán tus formas de promocionar tu servicio?, etc.
Acaso… ¿Esperas que tu objetivo se logre por sí solo? Es un error pensar que si no creas un plan de acción claro vas lograrlo independientemente de cuál sea, siempre tienes que hacer el trabajo paso a paso.
Si no te planteas una estrategia clara, no hay forma de saber si estás haciendo bien el trabajo todos los días. No hay forma de saber si estás procrastinando o no.
¿Tienes suficiente tiempo para trabajar en tus objetivos?
Incluso, puede pasar que tengas claro tus próximos pasos, pero no harás ningún progreso si no reservas el tiempo para ello. No puedes esperar que tu agenda se abra mágicamente y cree tiempo extra. En cambio, si sigues estos sencillos pasos te será más fácil lograrlo:
Deja de vivir en la irrealidad, es hora de dejar de pensar en tus metas como en sueños que se cumplirán por obra del azar. Utiliza la fórmula anterior para crear un plan claro. Te ayudará a dejar de usar las excusas y convertir esos sueños en realidad.
Si dejas todo para el último minuto es que tu trabajo no será tan bueno como podría ser y siempre estarás al borde de un ataque nervios o sumida en el estrés.
¡No me digas que prefieres trabajar bajo presión! Aunque confieso que yo lo hacía, dejaba acumular muchas tareas para luego darme con el látigo de “estoy desbordada”
Esto una excusa que usas para postergar lo que tienes que hacer, porque te has convencido que serás es que serás más eficiente en el último minuto.
Debes saber que si te gusta la adrenalina de hacerlo todo con prisas porque se acerca la fecha límite, a menudo significa malos resultados para tu negocio o empresa.
Si te dices a ti misma mañana será más fácil, te diré que no es cierto, pon un stop a cualquiera sea tu excusa para retrasar lo que debes hacer ya que mañana no será mejor. En el futuro tendrás que lidiar con los mismos problemas y serás como el pez que se muerde la cola, siempre en el mismo círculo sin poder salir.
Tampoco creas que al empezar con algo divertido y posponer el trabajo más importante para más tarde se hará por sí solo. El resultado será que nunca tendrás tiempo suficiente para cumplir con tu objetivo del día más importante, por lo tanto ¿Cómo llegarás a tu objetivo anual?
Te cuento mi estrategia propia que funcionó a la perfección, empecé todos los días a pensar las consecuencias de dejar todo para el último momento, por ejemplo, todas queremos clientas, más ingresos, Qué pensaría mi clienta si ve que todo lo dejo para el último minuto? ¿me sentiría merecedora de cobrarle la cantidad que le cobre? ¿si la invitase para mi empresa le gustaría la forma en la que gestiono los pendientes? ¿se sentiría honrada en tiempo, energía y dinero? ¿Repetiría con mis servicios? Las respuestas me llevaron automáticamente a exigir lo mejor y dar lo mejor de mi. Esta estrategia me permite también innovar en mis servicios día tras día.
También puedes establecer en tu calendario un tiempo diario de trabajo, durante ese período no debes abrir el correo electrónico / revisar tus redes sociales ocuparte en tareas fáciles. Simplemente comienza con aquello que debes hacer y te has propuesto porque es lo más importante.
Tal y como te he planteado, te ayudará trabajar con objetivos que sean alcanzables y medibles que además deben estar planificados desde el inicio y conectados con tu alma jamás olvides eso. De esa forma, cada día sabrás qué hacer y podrás empezar a trabajar sin distracciones ni excusas.
No te engañes pensando que mañana estarás más motivada, tendrás más tiempo o estarás más dispuesta a hacer el viernes lo que no hiciste durante la semana. Si miras hacia atrás eso no pasó y está claro que eso no sucederá.
Si eres de las que siempre está utilizando la falta de algo para no hacer tu trabajo, eres del tipo agobiada
Puede que digas que no tienes tiempo: estás demasiado ocupada en este momento. Tienes que esperar a que haya tiempo disponible en tu agenda o calendario para empezar a trabajar en tu meta.
Puede que sostengas que no tienes conocimiento necesario: Siempre puedes recurrir al buscador para que te ayude con las dudas puntuales que se presenten. Otra opción es contratar a un profesional para que te ayude con aquello que no sabes hacer.
Uno de tus mayores problemas es que no estableces una prioridad, todo es urgente, no tienes un orden lógico de ejecución por lo que te muestras reactiva a todos los frentes abiertos. Una estrategia que me funcionó fue preguntarme, Si solo hiciera una tarea que me de el 80% de resultados, ¿cuál sería? Y la respuesta la ejecutaba sin pensar, primero necesitaba adquirir el hábito antes de dotarla de intensidad.
El tiempo tampoco es el problema. La pregunta es, ¿estás dispuesta a hacer de tu objetivo una prioridad y no posponerlo más?
Puede que estés escudada en el perfeccionismo y dirás que todo lo haces en pos de la buena calidad. Sin embargo, existe una diferencia entre hacer un trabajo de calidad y perder el tiempo en detalles sin sentido. No te pierdas los detalles y postergues el trabajo realmente importante para ti y tu negocio.
Si te quedas esperando a que todo esté como quieres nunca harás nada. Esperar las circunstancias adecuadas es solo otra excusa.
Tienes en mente una gran meta y allí te quedas atascada perdiendo la noción de hacia dónde vas, te detienes en detalles sin sentido y a partir de allí no progresas.
La solución para que dejes de postergar es postergación debido al perfeccionismo es repetirte “Progreso, no perfección”. Incluso si terminas el 50% de lo que pensaba hacer hoy, es mucho mejor que nada.
El principio de Pareto te ayudará a visualizar mejor ,ya que propone la regla 80/20. Ignora todos los detalles que aportan solo el 20% de los resultados. Concéntrate en las tareas que le brindarán el 80% de los resultados que deseas.
Otra razón puede ser que tengas para la procrastinación es tener miedo de tus metas, de no lograrlas, de fracasar. Así vas posponiendo por el simple hecho que no quieres enfrentarse directamente al miedo.
Yo era una de ellas, tenía miedo de cometer un error o fallar. Empiezas a pensar en lo que pasará si lo arruinas, qué opinarán los demás. Entonces, en lugar de correr el riesgo, pospones el trabajo, esperando que en algún momento del camino sea más fácil y te sientas más seguro. Eso no pasará.
El miedo proviene porque estás saliendo de tu zona de confort. La única forma de deshacerte del miedo es enfrentarlo directamente. Si volviese en este momento a emprender de nuevo (por quinta vez) simplemente haría una lista de todas las razones que me impiden tomar acción y avanzar, al lado de cada una pondría mi objetivo anual y vería que tiene más peso.
Si quieres dejar de procrastinar y terminar este 2021 con la ayuda de una mentora, estoy aquí para ti. Si estás lista para empezar a trabajar conmigo, reserva una sesión de mentoría me contarás que necesitas y yo te diré si puedo ayudarte y con cuál de mis servicios profesionales. Clica aquí.
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